martes, 26 de enero de 2010

Artista multidisciplinar VII

Parece una idea bastante extendida la de que los artistas en general somos unos vividores, gente sin problemas reales y que se afana en disfrutar del momento, sin más preocupación que encontrar nuestro vino preferido y sin más ocupación que sacar a pasear a nuestro hurón; que habitamos lofts de alquiler no porque no podamos comprarlos sino porque tenemos una vida azarosa y sin ataduras; que preferimos caros restaurantes franceses a cadenas de comida rápida; que nos gusta conducir un Mini, Mercedes Clase A o Volkswagen Beetle en lugar de un Seat León o Skoda Fabia; en definitiva: que nos gusta llevar bufanda en agosto, fumar en pipa y ver el mundo a través de unas gafas de pasta.

Es posible que algunas de esas ideas sean verdad. Quizá incluso la mayoría. Puede que alguna no lo sea. De cualquier forma, todo lo mencionado -al menos la mayoría; seguro que algo sí- tenemos que pagarlo, y para eso necesitamos alguien que lo haga por nosotros o dinero, ya que no siempre estamos acompañados: es ahí cuando a los artistas se nos muestra la cara más amarga de la vida. Necesitamos una fuente de ingresos fiable, que nos permita asegurarnos el suministro de foie gras y cascos para lucir en nuestras Vespas, y teniendo en cuenta lo difícil que nos resulta mantener un empleo 'tradicional' por la tendencia de nuestra mente a viajar por el éter inspirativo nos vemos obligados a doblegar y domesticar nuestro arte, a cortarle las alas y ponerle bozal, a amansarlo para poder subsistir.

Es así como se ve en estos momentos el que escribe estas líneas: sería más exacto decir que se siente como si vendiera sus propios hijos; como un proxeneta de su propia creatividad.

Es así como se siente alguien que se ve obligado a regresar a esta publicación tras hacer sido despedido para no pasar hambre, porque las bufandas de primavera no lucirían bien en un cuello flaco.

2 comentarios:

Hombre Pene dijo...

Por fin te defines como Proxeneta...

la almáciga dijo...

Bienvenido, artista pródigo, que no prodigio!!